¿Cuál es la diferencia entre manejar una nueva empresa y una consolidada?

Ya hemos comentado más de una vez como el experto Miguel Portero encontró serias limitaciones para iniciar un negocio, pues durante su formación profesional ha sido entrenado exclusivamente para formar parte de una gran organización. En la pequeña empresa el entorno de trabajo es diferente; la iniciativa, el riesgo, la ausencia de directivas y procedimientos establecidos, la toma de decisiones con menos información y en una organización menos estable; son muchas variables a las que no está acostumbrado.

Por su parte, el primo de Miguel, el señor MYPE, maneja desde hace años un negocio exitoso pero tiene serios problemas para hacerlo crecer. Necesita aumentar su línea de crédito para generar más ingresos, pero eso implica modificar su pequeña organización y le cuesta hacerlo sin derrumbarla. Además, si él no está presente, el negocio no camina igual. Los trabajadores no se encuentran a gusto y cada cierto tiempo alguno se marcha a laborar a otras empresas, con lo que pierde tiempo y dinero en capacitar nuevo personal.  No era lo mismo empujar y liderar a los seis colaboradores que estuvieron con él desde el inicio de la aventura empresarial y estaban fuertemente motivados, que manejar un batallón de treinta empleados; ahora ni siquiera sabe el nombre de todos ellos.

Tarde o temprano llega el momento de que el señor MYPE contrate verdaderos profesionales para liderar el crecimiento de su empresa y llevarla al siguiente nivel.